Los niños de El Globo Rojo despiertan a sus héroes favoritos

• GloboFiesta 2014 se llena de imaginación y creatividad en su cuarto día de celebración con talleres de maquillaje para niños y un taller de discapacidad visual para padres

Niños y niñas de El Globo Rojo exhiben sus personajes favoritos con el maquillaje facial de fantasía realizado por un equipo muy coordinado de alumnas de los Ciclos de Estética Decorativa y de Educación Infantil del Instituto de Enseñanzas Aplicadas dirigido por su profesora Ana Gómez, y Mª Luz Nieto, profesora de la ONCE dirige un taller de discapacidad visual para las familias y así poder sentir en su propia piel como se mueven las personas invidentes en su vida diaria.

¿De qué quieres que te pinte? ¿De princesa? ¿De león? Todos los niños fueron pasando por las delicadas y hábiles manos de las alumnas de Estética Decorativa y Educación Infantil del IEA, para esbozar en sus caritas una máscara con la que iniciar un creativo juego imaginativo. Gracias a la magia del maquillaje, los niños se conviritieron por una tarde en lo que ellos quisieran, criaturas que pueblan sus sueños y los cuentos de su día a día.

Las alumnas procedieron a aplicar los productos, testados para las caritas más sensibles, previa aplicación de una suave crema, para tratar a los niños y niñas del cole. Unas disfrutaban viendo sus ojos sombreados de colores. Otros se regodeaban en los rasgos de un feroz león. También hubo simpáticos perros, bellos gatitos y gatitas, algún príncipe encantador, y varios superhéroes.

Tras la sesión de maquillaje, los niños protagonizaron un breve desfile, en el que los diseños fueron presentados ante sus papás, mamás, abuelos, abuelas y amigos. Animados a bailar al ritmo de la música y metidos en el papel de su disfraz facial, los niños disfrutaron de su momento de protagonismo, sintiéndose importantes, queridos, y valorando lo divertido que es jugar a disfrazarse.

Paralelamente, varios padres y madres se enfrascaban en un interesante taller de personas con ceguera, impartido por la profesora de la ONCE, Mari Luz Nieto. "Salieron de allí sabiendo leer y escribir un poco de braille", comentaba Mari Luz tras la actividad.

Sin duda, una tarde inolvidable y mágica que ni pequeños ni mayores olvidarán fácilmente.